Volkswagen para producción del Jetta en Puebla, por falta de componentes
La medida es aplicada para el primer turno de este jueves
por Redacción
Puebla, Méx. (Quinceminutos.MX). -Por falta de componentes automotrices, la planta de Volkswagen en Puebla, una de las más importantes de la compañía a nivel mundial, implementó este jueves 22 de agosto un paro técnico en su Segmento 1, encargado de la producción del modelo Jetta, y en diversas áreas auxiliares.
Según un comunicado interno emitido por la armadora, el paro técnico en el Segmento 1 se lleva a cabo el jueves 22 de agosto. Durante ese día, el primer turno no operará. Para compensar este paro, la empresa ha decidido que se tomará un día de vacaciones, con la posibilidad de que dicho día se cuente para otro paro futuro. Es importante destacar que solo se descansará un día esta semana, quedando pendiente un día de vacaciones.
Además, se mantendrá el rol de turnos habitual para todo el segmento y las áreas auxiliares. Se comunicará al personal su programación específica, incluyendo los días en los que se trabajará y no se trabajará, especialmente para aquellos que tienen labores programadas como retrabajos, mantenimiento, TPM (Mantenimiento Productivo Total), refacciones y otras actividades diversas.
Para garantizar la operatividad, se ha programado trabajo para cierto personal en áreas clave, con el objetivo de asegurar que los equipos y materiales necesarios estén disponibles cuando se reanuden las labores.
La empresa finalizó su comunicado solicitando comprensión a sus trabajadores, subrayando que estas decisiones son consecuencia de factores externos a la organización.
La escasez de insumos automotrices
La falta de componentes, que ha llevado a Volkswagen a tomar esta medida, es parte de un problema global que ha afectado a la industria automotriz desde el inicio de la pandemia de COVID-19. La crisis sanitaria interrumpió las cadenas de suministro, provocando escasez de microchips, metales y otros materiales esenciales para la fabricación de automóviles.
A medida que la demanda de vehículos ha ido en aumento, la oferta de insumos no ha podido seguir el mismo ritmo, generando cuellos de botella en la producción. Esta situación ha obligado a muchas armadoras a detener temporalmente sus operaciones, reestructurar turnos y ajustar sus proyecciones de producción.
En el caso de Volkswagen Puebla, la falta de componentes no solo afecta la producción local, sino que también tiene implicaciones para la cadena de suministro global de la compañía, que depende en gran medida de la planta mexicana para abastecer a diversos mercados.
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