¡Triunfo cardiaco del Club Puebla en el Estadio Cuauhtémoc ante Mazatlán!

Autogoles, una expulsión y golazos marcaron el encuentro

por Redacción/ChatGPT

Puebla, Méx. (Quinceminutos.MX). -El Club Puebla rugió con fuerza en su casa y logró su primer triunfo en el torneo Clausura 2024 al derrotar a Mazatlán con un emocionante marcador de 3-2 en un partido lleno de acción y sorpresas.

La noche del pasado viernes, los aficionados poblanos se congregaron en el Estadio Cuauhtémoc para presenciar un encuentro lleno de emociones y goles. Desde el pitazo inicial, ambos equipos mostraron su determinación por llevarse la victoria.

El partido arrancó con un autogol de Luis Olivas, defensa de Mazatlán, al minuto 16, en un intento desafortunado por proteger su portería. Sin embargo, la suerte cambió de lado cuando Diego de Buen, defensa del Club Puebla, anotó también un autogol al minuto 31, igualando así el marcador 1-1.

En el segundo tiempo, la intensidad se mantuvo en aumento. Fue Lucas Cavallini, delantero del Club Puebla, quien apareció en el área chica de los visitantes al minuto 61, asestando un gol que desató la euforia en la porra poblana.

El encuentro estuvo marcado por jugadas fuertes y cambios tácticos, lo que llevó a una tarjeta roja para Gustavo Ferrareis del Club Puebla, dejando al equipo local con solo 10 jugadores en el campo.

Aprovechando la ventaja numérica, al minuto 90, el mediocampista de Mazatlán, Edgar Bárcenas, logró colocar el balón en la red del Puebla, igualando nuevamente el encuentro 2-2.

Pero como ya es característico del Club Puebla, en el último minuto de compensación y a unos segundos del pitazo final, Santiago Ormeño se convirtió en el héroe del partido al anotar el gol de la victoria al minuto 90+1, desatando la celebración en el Estadio Cuauhtémoc.

Con este emocionante triunfo, el Club Puebla suma cuatro puntos en el torneo Clausura 2024, tras un difícil inicio con tres derrotas y un empate. La Franja demuestra una vez más su capacidad de lucha y determinación en la cancha, dejando claro que no hay nada imposible cuando se juega con corazón y garra.