Restos hallados en Cañada Morelos son de tres jóvenes; aún no localizan al cuarto

Los sicarios les habrían atribuido la participación en un asesinato

por Redacción

Puebla, Méx. (Quinceminutos.MX). - Los restos hallados el pasado miércoles dentro de nueve bolsas de plástico en la comunidad en la carretera Azumbilla - San Salvador El Seco corresponden a tres de los cuatro jóvenes reportados como desaparecidos en la comunidad de Puerta Cañada, en el municipio de Cañada Morelos.

En una rueda de prensa, el fiscal general del estado de Puebla, Gilberto Higuera Bernal, explicó que los cuerpos corresponden a dos hombres y una mujer, quienes eran familiares entre sí, y que fueron privados de su libertad debido a un conflicto entre bandas delictivas que operan en la zona.

Descartó que los hoy occisos fueran víctimas de desaparición y posteriormente ejecutados, indicando que una cuarta persona aún no ha sido localizada, por lo que ya realizan labores de búsqueda.

"Los restos corresponden a dos hombres y una mujer. La Fiscalía ha llevado a cabo actos de investigación; ha avanzado considerablemente en el caso. Son personas que están relacionadas entre sí, y se están obteniendo indicios importantes que nos permitirán conocer pronto los nombres de los implicados", informó ante los medios de comunicación.

Higuera Bernal explicó que su hipótesis preliminar, es que se trató de una disputa entre dos bandas criminales y que los responsables de este triple asesinato atribuyeron a las víctimas el haber participado en un homicidio.

Es importante recordar que el pasado 14 de febrero, alrededor de las 14:00 horas, automovilistas reportaron la presencia de bolsas negras con presuntos restos humanos, esto ocurrió a la altura del paraje conocido como La Herradura, ubicado antes de llegar a Cañada Morelos.

Casi a la par de los hechos fue difundido un video en redes sociales, donde se observa a dos de los jóvenes siendo torturados por un grupo de personas que portan armas largas. Los jóvenes se observan maniatados y con golpes en el rostro, mientras sus sicarios les apuntan en grupo para amedrentarlos.