Del dicho al hecho: los alcaldes de la 4T

Alcaldes de la 4T están metidos en verdaderos conflictos de inseguridad, financieros, de intereses y hasta de opacidad, es decir, todo aquello que criticaban cuando eran oposición.

No solo la alcaldesa de Puebla capital, Claudia Rivera Vivanco y el alcalde de Tehuacán, Felipe Patjane Martínez tienen sus municipios de revés, sino que el ejercicio de poder también se les ha complicado a quienes resultaron electos en municipios de menor envergadura como las Cholulas, Acatzingo, Acajete, Huejotzingo, Izúcar, etc.

En San Pedro Cholula, Luis Alberto Arriaga se ha topado con la inseguridad, al grado de que en el mes de septiembre el municipio se ubicó con ocho focos en rojo de los 11 que analiza el Semáforo Delictivo y Karina Pérez Popoca, enfrenta el escándalo por supuesto caso de nepotismo.

En Acatzingo, el alcalde José Norberto Manuel Rosales García ha sido señalado por falta de obra y poca claridad en el manejo de los recursos, además de los conflictos por la inseguridad y la operación de bandas delictivas que no ha podido controlar.

Acajete ocurre un caso peculiar, porque en aras de la “austeridad Republicana”, el alcalde Roberto Ramírez Cervantes, continuamente ha dejado sin sueldos a los trabajadores de la Comuna. Incluso, los afectados anunciaron que para este lunes emprenderían un paro de labores porque no han recibido salario desde hace tres quincenas.

Un tema totalmente opuesto se registra en Huejotzingo, donde la nómina es de más de 6.5 millones de pesos, con sueldos de 40 mil pesos para los integrantes del Cabildo, así como de entre 22 y 27 mil pesos para altos funcionarios.

En Izúcar, los problemas originados por personajes externos que fueron señalados por personal del Sistema Operador de Agua Potable, continúan vigentes, pero agudizadas tras la salida de Melitón Lozano Pérez, quien dejó la comuna para irse de secretario de Educación.

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Videos que circulan en las redes sociales difunden una riña entre “hijos del presidente” municipal de Huauchinango, Gustavo Vargas Cabrera, en donde unos los culpan y otros los ponen como víctimas. En los hechos intervienen policías municipales. Hasta el momento el edil no ha dado a conocer su versión y tampoco otra autoridad municipal. 

El tema que se ha convertido en un escándalo en el municipio y por ende, de interés público, habría ocurrido en la colonia El cerrito, cercana al primer cuadro de la cabecera municipal, sin embargo, algunos medios difunden versiones que pretenden hacer pensar que los hechos ocurrieron en el municipio de Juan Galindo.

Sobre el tema, el alcalde de Juan Galindo, asegura que su Policía Municipal no tuvo reporte de tales acontecimientos, por lo que descartó que los elementos hayan participado para disuadir la riña y abundó que, en las publicaciones se puede identificar a las patrullas de Huauchinango. 

Twitter: @mecinas