Solicita comuna intervención del Estado para resolverlo

Ocoyucan, Pue.- Un grupo de pobladores, encabezados por el sacerdote de la iglesia de San Bernardino, Javier Solís, intentaron reabrir el salón de evangelización de la iglesia de San Bernardino sin tener para ello ninguna facultad legal, lo que reavivó el conflicto religioso en la comunidad grupos religiosos.

El 1 de abril, luego de que los fiscales se percataron de las acciones del grupo encabezado por el sacerdote Javier Solís, solicitaron el auxilio del gobierno municipal a fin de que sea respetado el acuerdo de que el salón permanezca bajo resguardo.

Por ello, el gobierno municipal de Ocoyucan, encabezado por el edil antorchista José Santos Técuatl Mejía, hizo un llamado a las autoridades estatales para actuar en favor de la paz y tranquilidad que ha existido en los últimos años en la junta auxiliar de San Bernardino Chalchihuapan.

El salón de evangelización de la iglesia ha permanecido bajo resguardo de las autoridades eclesiásticas del estado de Puebla, porque hace algunos años fue motivo de conflicto entre algunos pobladores. Por esta razón, la Arquidiócesis decidió cerrarlo y mantener las llaves de la puerta de acceso bajo resguardo.

Al respecto, el edil consideró necesario "el pronto actuar de las autoridades para conservar la tranquilidad que ha prevalecido en Chalchihuapan en los últimos años, desde que los vecinos entregaron dicho salón a las autoridades competentes”.

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