El arte es muy subjetivo, depende de quien lo produce y de quien lo observa

De acuerdo con lo señalado por Alonso Fragua, jefe del área de Espacios Culturales y Patrimonio Artístico de la Universidad de las Américas Puebla (UDLAP), así como fundador de “Karakol”, Asesoría y Gestión Cultural, las artes del siglo XXI son aquellas vinculadas con la tecnología y que, además, logran generar una experiencia estética, sensorial o de reflexión. “Primero, habría que definir qué es arte, y creo que es algo indefinible, o que es una necedad pretender crear marcos estrictos para definirlo. Creo que en el siglo XXI, al menos según el paradigma con el que yo concuerdo, las artes, en definitiva, no son belleza, o mejor dicho, no tienen que ser siempre sinónimo de belleza, sino que son experiencias y objetos que te generan un acercamiento al mundo y una reflexión sobre el mundo. En fin, el concepto de arte es muy subjetivo, depende mucho de quien lo produce y de quien lo observa, de quien lo valida como tal o no”, expresó el especialista en cuestión. En ese sentido, abundó que el "video mapping" (proyectar imágenes o animaciones sobre superficies reales, normalmente inanimadas); otras cuestiones audiovisuales; cosas con "realidad aumentada"; y el “dat art” ( datos usados para expresar emociones o con un fin artístico, y no en su papel común, el de fuentes de estadísticas o fríos objetos) podrían ser considerados como algunas de las artes del siglo en curso. En relación con los “youtubers”, apuntó que quizás algunos tipos de videoensayos, transmitidos por dichos ídolos del mundo 2.0, podrían ser catalogados por ciertos sectores como arte. Igualmente, recordó que en YouTube se pueden hallar distintas manifestaciones artísticas. No obstante, otro de los productos de la Internet y de las redes sociales, la "meme cultura", no la considera arte, sino únicamente una forma moderna de expresión o comunicación, la cual es accesible y masiva. Por otra parte, el integrante de la UDLAP se confesó como un promotor fiel de que las adaptaciones cinematográficas contemporáneas de obras literarias clásicas (como el film “Romeo y Julieta”, protagonizado por Leonardo Di Caprio y Claire Danes), los “covers” musicales y otras obras similares se utilicen para acercar a las nuevas generaciones tanto al conocimiento como a las experiencias estéticas, para así evitar que dichas generaciones solamente tengan disponibles las opciones producidas por la “Alta Cultura”. “Te permiten acercarte a grandes obras desde una postura más contemporánea, con referentes mucho más actuales y cercanos en muchos sentidos, pues no puedes pretender hablarle a la gente de filósofos griegos, así, sin contexto, de manera abstracta, cuando la mayoría no tiene la menor idea de qué fue, cómo fue y cuándo fue la Grecia Antigua, por hablar sólo de un ejemplo”, señaló. Recientemente, Alonso Fragua fungió como uno de los organizadores y participantes del encuentro denominado “The viral is the new art”, en el cual se debatieron y analizaron, desde perspectivas diversas, varios tópicos relacionados con la formación artística en la sociedad del siglo XXI.

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